1 A ti, Señor, elevo mi alma.
A ti, oh Señor, elevo mi alma.
2 E res mi Dios, y en ti confío; ¡no permitas que mis enemigos me avergüencen y se burlen de mí!
Dios mío, en ti confío; no sea yo avergonzado, que no se regocijen sobre mí mis enemigos.
3 N o permitas que sean avergonzados los que en ti ponen su esperanza; más bien, que sean puestos en vergüenza los que sin razón se rebelan contra ti.
Ciertamente ninguno de los que esperan en ti será avergonzado; sean avergonzados los que sin causa se rebelan.
4 S eñor, dame a conocer tus caminos; ¡Enséñame a seguir tus sendas!
Señor, muéstrame tus caminos, y enséñame tus sendas.
5 T odo el día espero en ti; ¡enséñame a caminar en tu verdad, pues tú eres mi Dios y salvador!
Guíame en tu verdad y enséñame, porque tú eres el Dios de mi salvación; en ti espero todo el día.
6 R ecuerda, Señor, que en todo tiempo me has mostrado tu amor y tu misericordia.
Acuérdate, oh Señor, de tu compasión y de tus misericordias, que son eternas.
7 T ú, Señor, eres todo bondad. Por tu misericordia, acuérdate de mí; pero olvídate de que en mi juventud pequé y fui rebelde contra ti.
No te acuerdes de los pecados de mi juventud ni de mis transgresiones; acuérdate de mí conforme a tu misericordia, por tu bondad, oh Señor.
8 E l Señor es bueno y recto; por eso enseña a los pecadores el camino.
Bueno y recto es el Señor; por tanto, El muestra a los pecadores el camino.
9 E l Señor muestra su camino a los humildes, y los encamina en la justicia.
Dirige a los humildes en la justicia, y enseña a los humildes su camino.
10 M isericordia y verdad son los caminos del Señor para quienes cumplen fielmente su pacto.
Todas las sendas del Señor son misericordia y verdad para aquellos que guardan su pacto y sus testimonios.
11 S eñor, muy grande es mi pecado, pero haz honor a tu nombre, y perdóname.
Oh Señor, por amor de tu nombre, perdona mi iniquidad, porque es grande.
12 ¿ Quieres tú servir al Señor? Él te mostrará el mejor camino.
¿Quién es el hombre que teme al Señor ? El le instruirá en el camino que debe escoger.
13 T e hará disfrutar de bienestar, y tus descendientes heredarán la tierra.
En prosperidad habitará su alma, y su descendencia poseerá la tierra.
14 E l Señor es amigo de quienes le temen, y confirma su pacto con ellos.
Los secretos del Señor son para los que le temen, y El les dará a conocer su pacto.
15 S eñor, siempre dirijo a ti la mirada porque tú me libras de caer en la trampa.
De continuo están mis ojos hacia el Señor, porque El sacará mis pies de la red.
16 M írame, y ten compasión de mí, pues me encuentro solo y oprimido.
Vuélvete a mí y tenme piedad, porque estoy solitario y afligido.
17 C rece en mi corazón la angustia; ¡líbrame de esta congoja!
Las angustias de mi corazón han aumentado; sácame de mis congojas.
18 ¡ Mira cómo sufro y me esfuerzo! ¡Perdóname todos mis pecados!
Mira mi aflicción y mis trabajos, y perdona todos mis pecados.
19 ¡ Mira cómo aumentan mis adversarios, y cuán grande es su odio contra mí!
Mira mis enemigos, que son muchos, y con odio violento me detestan.
20 ¡ Sálvame! ¡Protégeme! ¡No me dejes quedar en vergüenza, pues en ti he puesto mi confianza!
Guarda mi alma y líbrame; no sea yo avergonzado, porque en ti me refugio.
21 ¡ Protege mi integridad y rectitud, pues en ti he puesto mi esperanza!
La integridad y la rectitud me preserven, porque en ti espero.
22 ¡ Salva, oh Dios, a Israel de todas sus angustias!
Oh Dios, redime a Israel de todas sus angustias.