1 N o tengas envidia de los hombres malos ni desees juntarte con ellos,
2 p orque su corazón trama violencias e iniquidad hablan sus labios. -20-
3 C on sabiduría se edifica la casa, con prudencia se afirma
4 y con ciencia se llenan las cámaras de todo bien preciado y agradable. -21-
5 E l hombre sabio es fuerte, y de pujante vigor el que tiene ciencia.
6 P orque con ingenio harás la guerra, y en los muchos consejeros está la victoria. -22-
7 A lta está para el insensato la sabiduría; en la puerta no abrirá él su boca. -23-
8 A l que piensa hacer el mal lo llaman «hombre de malos pensamientos».
9 E l pensamiento del necio es pecado, y abominable para los hombres el escarnecedor. -24-
10 S i flaqueas en día de adversidad, tu fuerza quedará reducida. -25-
11 L ibra a los que son llevados a la muerte, salva a los que tienen su vida en peligro.
12 P orque si dices: «Lo cierto es que no lo supimos», ¿acaso no lo considerará el que pesa los corazones? El que mira por tu alma, él lo conocerá, y él pagará al hombre según sus obras. -26-
13 C ome, hijo mío, de la miel, porque es buena; el panal es dulce a tu paladar.
14 A sí será para ti el conocimiento de la sabiduría: si la hallas tendrás recompensa y al fin tu esperanza no será frustrada. -27-
15 T ú, malvado, no aceches la morada del justo, no saquees el lugar de su descanso;
16 p orque aunque siete veces caiga el justo, volverá a levantarse, pero los malvados caerán en el mal. -28-
17 N o te regocijes cuando caiga tu enemigo, ni cuando él tropiece se alegre tu corazón,
18 n o sea que Jehová lo vea y le desagrade, y aparte de sobre él su enojo. -29-
19 N o te juntes con los malignos ni envidies a los malvados,
20 p orque para el malo no habrá buen fin: ¡la lámpara de los malvados se apagará! -30-
21 T eme a Jehová, hijo mío, y al rey, y no te juntes con los veleidosos;
22 p orque su desgracia llegará de repente; y el quebranto que viene de ambos, ¿quién puede saberlo? CUARTA COLECCIÓN://DICHOS DE LOS SABIOS
23 T ambién éstos son dichos de los sabios: Hacer distinción de personas en el juicio no es bueno.
24 A quien diga al malo: «Tú eres justo», los pueblos lo maldecirán y lo detestarán las naciones;
25 p ero quienes lo reprendan tendrán felicidad y sobre ellos vendrá gran bendición.
26 ¡ Besados sean los labios del que responde con palabras correctas!
27 P repara tus labores fuera, dispónlas en tus campos y edifica después tu casa.
28 N o seas sin causa testigo contra tu prójimo ni digas falsedades con tus labios.
29 N o digas: «Haré con él como él hizo conmigo; pagaré a ese hombre según merece su obra.»
30 P asé junto al campo del hombre perezoso, junto a la viña del hombre falto de entendimiento;
31 y vi que por toda ella habían crecido los espinos, ortigas habían cubierto la tierra y la cerca de piedra ya estaba derribada.
32 M iré, y lo medité en mi corazón; lo vi, y aprendí la lección:
33 U n poco de sueño, dormitar otro poco y otro poco descansar mano sobre mano:
34 a sí te llegará la miseria como un vagabundo, la pobreza como un hombre armado.