1 O h Dios, no guardes silencio; No calles, oh Dios, ni permanezcas inmóvil.
2 P orque he aquí que rugen tus enemigos, Y los que te aborrecen alzan cabeza.
3 C ontra tu pueblo han conspirado astuta y secretamente. Y se han conjurado contra tus protegidos.
4 H an dicho: Venid, y destruyámoslos para que no sean nación, Y no haya más memoria del nombre de Israel.
5 P orque se confabulan de corazón a una, Contra ti han concertado alianza
6 L as tiendas de los edomitas y de los ismaelitas, Moab y los agarenos;
7 G ebal, Amón y Amalec, Los filisteos y los habitantes de Tiro.
8 T ambién el asirio se ha juntado con ellos; Sirven de brazo a los hijos de Lot. Selah
9 H azles como a Madián, Como a Sisara, como a Jabín en el arroyo de Cisón;
10 Q ue perecieron en Endor, Fueron hechos como estiércol para la tierra.
11 P on a sus capitanes como a Oreb y a Zeeb; Como a Zeba y a Zalmuná a todos sus príncipes,
12 Q ue decían: Apoderémonos de los dominios de Dios.
13 D ios mío, ponlos como remolinos de polvo, Como hojarasca delante del viento,
14 C omo fuego que quema el monte, Como llama que abrasa el bosque.
15 P ersíguelos así con tu tempestad, Y atérralos con tu torbellino.
16 L lena sus rostros de vergüenza, Para que busquen tu nombre, oh Jehová.
17 S ean afrentados y turbados para siempre; Sean confundidos, y perezcan.
18 Y conozcan que tu nombre es Jehová; El Altísimo sobre toda la tierra.