Y esé mandó a traerlo, y cuando éste llegó lo invitó a pasar. Era un jovencito rubio, de hermosos ojos y de agradable apariencia. Entonces el Señor le dijo a Samuel: «Éste es mi elegido. Levántate y conságralo.»
Y envió por él y lo hizo entrar. Era rubio, de ojos hermosos y bien parecido. Y el Señor dijo: Levántate, úngele; porque éste es.
Continue reading Report error