E liseo le ordenó entonces a su criado que la llamara. Guejazí la llamó y, cuando ella se detuvo en la puerta,
فَقالَ ألِيشَعُ: «ادْعُها.» فَدَعا جِيحَزِي المَرأةَ. فَجاءَتْ وَوَقَفَتْ بِالبابِ.