و َبَعدَ مُدَّةٍ مِنَ الزَّمَنِ جَفَّ النَّهْرُ، إذْ لَمْ يَنزِلْ أيُّ مَطَرٍ.
Y sucedió que después de algún tiempo el arroyo se secó, porque no había caído lluvia en la tierra. Elías y la viuda de Sarepta